Pink Floyd

The dark side of the moon

Harvest Records (1973)

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“Entre las cualidades que hacen de The dark side of the moon un disco accesible al gran público, y al mismo tiempo una obra suprema de la música contemporánea, es que logró expresar la decepción de una sociedad que perdió sus más nobles ideales. Para 1973 a la mayoría de nuevos adultos, aquellos identificados con la lucha libertaria del 68, esas nuevas familias formadas por padres que habían experimentado el verano de amor y esperanza en el 69, ahora les llegaba su turno de madurar, de reconocer que sus hijos y el trabajo son fuerzas más poderosas que la filosofía rebelde de su adolescencia.”

L. C. Bermeo Gamboa (El País)

 

 

El octavo disco de estudio de la banda británica Pink Floyd sigue siendo uno de los más vendidos de la historia (el primero es el Thriller de Michael Jackson) con alrededor de 45 millones de copias en todo el mundo. Después de 50 años de su publicación, resulta todavía sorprendente este éxito comercial al tratarse de un álbum conceptual y bastante complejo, en principio muy alejado del consumo de masas. El hecho es que sus datos son impresionantes, ya que se mantuvo durante 741 semanas consecutivas (casi ocho años) en la lista Billboard de los 200 discos más vendidos. A esta respuesta tan positiva del público se unió la opinión de la crítica especializada, que lo aclamó como un icono cultural y un referente imprescindible en la historia del rock. Para algunos incluso sería el mejor álbum de todos los tiempos, aunque esto ya es más discutible, cuestión de gustos.

 

 

El disco se fue gestando y puliendo con calma, y ya en enero de 1972 se interpretó al completo en directo, para ir comprobando la reacción de los seguidores. El trabajo estaba muy avanzado para cuando comenzó la grabación en los míticos Abbey Road Studios, hasta su posterior publicación en marzo de 1973. El resultado ya lo conocemos, éxito de ventas, músicos millonarios y Pink Floyd convertido en uno de los grupos más famosos del planeta. Con las enormes ganancias, a modo de anécdota, se permitieron incluso financiar en parte la película The Holy Grail de los Monty Python (en España conocida como Los caballeros de la mesa cuadrada). La banda mantuvo durante la década de los 70 un nivel bastante productivo, con trabajos brillantes como Wish you were here o The Wall. Luego, en los 80, vendrían los problemas de Roger Waters con el resto de miembros, y su abandono del grupo.

 

 

La formación de Pink Floyd  la componían Roger Waters (voz, bajo y letrista principal), David Gilmour (guitarra y voz), Nick Mason (batería) y Richard Wright (teclados). Para The dark side of the moon contaron en la producción con Alan Parsons, una aportación fundamental para que el disco resultase finalmente tan avanzado e innovador. Grabaciones multipista, loops y todo tipo de efectos de sonido (latidos de corazón, cajas registradoras, relojes…). La temática del álbum trataba un conjunto homogéneo de inquietudes humanas, como la enfermedad mental, el dinero, la guerra, la muerte, el estrés o el significado de la vida. Y finalmente hay que destacar la famosa y llamativa cubierta, diseñada por George Hardie y el colectivo Hipgnosis, con el prisma atravesado por la luz que se convierte en los colores del arcoíris.

 

 

“Hasta aquí la banda era considerada sólo una excentricidad musical inglesa -entre muchas otras excentricidades- cuyos shows de luces fascinaban tanto al público que nadie prestaba atención a los músicos. Para algunos, la rareza de Pink Floyd sólo era superada por Frank Zappa. Pero ahora, por primera vez, se imponían una exigencia un poco más conservadora, pensaban crear una obra total y coherente de pies a cabeza.”

El País

 

 

En la Biblioteca podrás llevarte en préstamo esta obra inmortal del rock progresivo y psicodélico, además de otros cd’s del grupo, como Wish you were here o el recopilatorio Echoes: the best of Pink Floyd.

Y recuerda… “en realidad no hay un lado oscuro de la luna, toda ella es oscura”.