La Novia Cadáver es una de las últimas invenciones de Tim Burton, siendo él mismo productor y director de la película. Como no cabía esperar de otra manera, la banda sonora ha sido compuesta por Danny Elfman, y las voces de los actores principales son las de sus actores fetiche: Johnny Depp y Helena Bonham Carter.
Ganó el premio en la categoría Premio Future Film Festival Digital, en el 2005, en el Festival Internacional de Cine de Venecia y fue nominada en los Oscars del 2006, a la mejor película de animación, aunque la película ganadora en esa categoría fue Wallace & Gromit: la maldición de las verduras.
El encanto de esta película musical radica en la contraposición de realidades que existen entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos.
El primero, es un lugar oscuro, aburrido y apagado, donde los comportamientos son rectos e intachables, y no queda lugar para la diversión: todo se hace por obligación, porque es lo que debe ser. Y algunos de los que ahí habitan son ambiciosos y traicioneros.
En cambio, el mundo de los muertos es un lugar alegre, colorido, donde reina el compañerismo y la diversión. Tanto es así que hacen fiesta y espectáculo cada vez que alguien llega, por haber muerto previamente.
El protagonista es Víctor, un joven, hijo de burgueses adinerados que buscan su lugar entre la alta sociedad por lo que le han prometido con Victoria, hija de aristócratas venidos a menos, que necesitan de los burgueses para volver a enriquecerse.
Pero, Víctor es demasiado tímido y no soporta la presión a la que le someten en los ensayos de la boda, y escapa al bosque para poder aclarar sus ideas y serenarse. Allí, envalentonado por la soledad, pronuncia los votos que antes no consiguió decir al tiempo que pone la alianza en una rama sobresaliente… que resulta ser el dedo de un cadáver, que exige llevárselo con él al reino de los muertos para cumplir sus votos matrimoniales.
Cuando Victor despierta, se encuentra en el submundo, rodeado de cadáveres al cual más extravagante, y pone todo su empeño en regresar al mundo de los vivos para volver junto a su encantadora prometida.
El final, es inesperado y cargado de frescura y tintes de humor negro, conseguido gracias a la diversidad de personajes y carácteres tan dispares que sólo Burton sabe crear.