Ernest Hemingway en la Finca Vigía (Cuba)

“Adiós, Hemingway” novela del autor galardonado en 2015 con el Premio Princesa de Asturias, es una obra de intriga con personajes reales como el escritor Ernest Hemingway: ficción mezclada con personas que han existido.

Leonardo Padura en anteriores novelas ya tenía como protagonista al teniente de policía Mario Conde, que más tarde decide retirar. Pero en el prólogo cuenta que necesita otra vez de sus servicios para resolver el caso, aunque ya no es policía sino detective y vendedor de libros de segunda mano.

La acción transcurre en La Habana y comienza recordando cómo hace 40 años Conde visitó con su abuelo el puerto de  Cojímar y vio a Hemingway  y se atrevió a saludarlo. En esos momentos sentía gran fascinación y admiración que luego se transformó en repulsa después de conocer cómo trataba a la gente.

“Yo adoraba a ese hombre y ahora me cae como una patada. Pero la verdad es que no lo conozco. Es más, creo que nadie le conoce. Déjame averiguar quién era: eso es lo que quiero. A lo mejor entonces sé que pasó.”

Después de un vendaval la caída de un árbol en la Finca Vigía, donde vivió Hemingway y que ahora es un Museo sobre él, aparecen restos de un cadáver con signos de haber sido asesinado. Conde participa en la investigación.

La narración no es lineal sino que se van entremezclando momentos en los que transcurrió la acción que se investiga y el momento de la investigación. Para intentar aclarar lo que pudo suceder hace un recorrido por la vida, por las miserias, por las relaciones con la gente de la isla y por las situaciones que Hemingway  tuvo, asistiendo a los últimos años de vida del escritor, con pasajes y escenas muy sugerentes, bien descritas.

En el relato conocemos algunas de las personas que convivieron con Hemingway, interrogadas más tarde por Conde y mostrándonos matices de su vida y de su obra y en qué momento se gestó. El investigador para encontrar la verdad busca en su obra literaria.

En nuestra Biblioteca tenemos esta y otras obras de Leonardo Padura, que cultiva un género policíaco, entretenido y bien escrito y documentado. Así como guías de Cuba para los que se animen a visitarla.

Rosa Jiménez Villarín