Marilar Aleixandre, nace en Madrid pero se instala desde 1973 en Galicia después de sacar una plaza de catedrática, feminista reconocida, pionera en el uso del gallego como lengua vehicular, utiliza el gallego en su obra escrita y en esta novela es su traductora. “Las malas mujeres” es Premio Nacional de Narrativa 2022 y Premio Blanco Amor
2020; gracias a ellos es más conocida.

Se puede considerar una novela histórica por el período del que habla, se desarrolla en el siglo XIX, y por la aparición de personajes históricos, unidos a personajes ficticios. Escrita en varios niveles, uno en el que aparecen los personajes históricos, principalmente Concepción Arenal con el aporte de la documentación relativa al momento, que concede al texto más verosimilitud; otro plano en el aparecen los personajes ficticios con Sisca a la cabeza, presa de la cárcel de La Galera en la ciudad de La Coruña; y un tercer plano en el que hay un coro de mujeres en el que conocemos a algunas presas y los acontecimientos que las llevaron al penal.

Es la recuperación de la memoria de las mujeres presas en la ya desaparecida cárcel de La Galera de La Coruña, mujeres pobres, marginales y castigadas a veces en exceso y sin posibilidad de recurrir el veredicto ni conseguir una verdadera justicia. A esta situación tan poco favorable se unen las penosas condiciones físicas del penal, y el trato
personal sin dignidad que favorece el miedo y la indefensión.

“El relampagueo de las tijeras en las manos del hombre, un escalofrío. Rapar el cabello, lo que más duele. Lo único hermoso que poseía, la caballera castaña. Tan larga, al soltarla cubría hasta las rodillas el cuerpo desnudo. De nada valdría, sin embargo.”

Por otro lado, hay un grupo de mujeres liberales que, teniendo algún poder, lucharon, no exentas de dificultad por mejorar las condiciones de las presas, enseñándolas a leer y ayudándolas para que los conocimientos posibilitaran su mejor defensa. La importancia de la educación y de aprender algún oficio para poder ser más independientes
y defenderse mejor a su salida de la cárcel.

“En Coruña, unos años antes, había dado mucho que hablar un debate, organizado por el Ateneo, sobre si la educación de la mujer es un elemento necesario para la prosperidad de una nación. Según Pérez Costales, un filántropo que por otra parte ha creado una escuela para niños pobres, las mujeres intelectuales son seres monstruosos en los que coexisten rasgos masculinos y femeninos. Si esto dictaminan los ilustrados de Coruña sobre las mujeres de buena familia que saben leer, qué pensarán del afán por enseñar las letras a las delincuentes de la Galera.”

Hay dos personajes principales: Concepción Arenal en su época de Visitadora de Prisiones y con otras mujeres ofrecerles ayuda para tener mayores oportunidades. Y Sisca, adolescente de clase muy humilde condenada por acompañar a su madre a realizar un aborto; vive una situación muy difícil que le produce mucha rabia e indefensión. Se añaden algunos capítulos en los que se comentan por un coro de voces femeninas las situaciones que llevaron a otras presas a esta situación.

Novela muy recomendable, en la que se abordan muchos temas, algunos tan importantes como la injusticia, la indefensión de las presas, el dominio de los hombres sobre las mujeres, la miseria y la importancia de saber leer, de tener una formación para poder ser independiente, la lucha del otro grupo de mujeres por mejorar la situación de las presas y como lecturas, especialmente de Rosalía de Castro llega a las reclusas llegando a emocionarlas.

“Escuchando la lectura lloran las infelices mujeres, aunque no todas».

Rosa Jiménez Villarín