En febrero de 2019 se cumplieron 80 años de la muerte de Antonio Machado. El poeta había dejado en el bolsillo de su abrigo un papel en el que había escrito sus últimos versos:
Estos días azules
y este sol de la infancia
Días antes de su muerte, como tantos otros españoles, había cruzado la frontera con Francia huyendo del avance del ejército de Franco que finalmente daría por concluida la guerra el 1 de abril de ese mismo año (1939). Seguramente ese exilio republicano, el de la gran retirada hacia Francia, el de los niños enviados a la Unión Soviética o el de los barcos como el Sinaia, el Ipanema o el Mexique (de los que exponemos los diarios de a bordo) que los llevaron hasta México sea el más conocido. Pero antes hubo otros como el de los afrancesados o las personas que de un modo u otro se relacionaron con el régimen de José Bonaparte, que debieron abandonar España al regreso de Fernando VII en 1814, y el de los liberales también en las etapas absolutistas de este monarca.
Para conmemorar el Día del Libro, la Biblioteca de Ciencias Sociales y Jurídicas expone una selección de libros relacionados con estos exilios y centrada en Antonio Machado como representante del exilio republicano, en José María Blanco White, escritor liberal y bilingüe exiliado en Inglaterra y en Irlanda, y en Goya, amigo de afrancesados tan ilustres como Moratín y testigo excepcional de la Guerra de Independencia, que supo retratar en toda su crueldad. También les dedicamos un espacio a tantas mujeres que tuvieron que abandonar España después de la Guerra Civil, mujeres como Maruja Mallo, Concha Méndez, María Teresa León, María Zambrano, Carmen Parga, …
Muchos de los materiales que mostramos pertenecen al fondo formado gracias a la donación de uno de estos exiliados, Nicolás Sánchez Albornoz, historiador como su padre, Claudio Sánchez Albornoz, quien polemizara desde el exilio con Américo Castro (también exiliado) acerca de la idea de España.
Encontraremos libros que relacionan el exilio de los liberales en Inglaterra con el Romanticismo (Blanco White dedica uno de sus poemas en inglés a Coleridge), como Liberales y Románticos de Vicente LLoréns, otros que estudian el confinamiento de los republicanos en los campos de concentración franceses o en el gulag, o aquellos que hablan en primera persona de su lucha no sólo en la guerra civil sino también en la Segunda Guerra Mundial como Testimonio de dos guerras de Manuel Tagüeña, quien partió al exilio en la Unión Soviética, participó en la guerra con su ejército y finalmente se exilió en México después de pasar por Yugoslavia y Checoslovaquia.
Volvemos a Machado y terminamos este post con otros versos suyos:
[…]y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar