Esta tarde queremos hablaros de Emilio Ruiz del Río (1923 – 2007), considerado como uno de los mejores especialistas de efectos especiales cinematográficos del mundo. Pintor, decorador, maquetista, experto en efectos especiales y visuales y director artístico, en una época en la que no existían los efectos digitales Ruiz del Río conseguía con sus ilusiones ópticas, rodadas en directo, planos indistinguibles de la realidad, gracias a sus miniaturas y maquetas y sus pinturas sobre cristal y aluminio.
A lo largo de su dilatada carrera participó en más de 500 películas -muchas de ellas superproducciones emblemáticas de la historia del cine-, desde La aldea maldita, dirigida por Florián Rey en 1942, hasta El laberinto del fauno de Guillermo del Toro en 2007. De entre esos largometrajes bien podemos destacar Espartaco de Stanley Kubrick -basada en la novela homónima de Howard Fast-, Rey de reyes de Nicholas Ray, Cleopatra de Joseph L. Mankiewicz, La caída del Imperio romano de Anthony Mann, Los últimos días de Pompeya de Sergio Leone -basada a su vez en la novela de Edward Bulwer-Lytton-, 55 días en Pekín de Nicholas Ray, Lawrence de Arabia y Doctor Zhivago, ambas de David Lean – y basada la última en la novela de Boris Pasternak-, Golfus de Roma de Richard Lester, Patton de Franklin J. Schaffner, Operación Ogro de Gillo Pontecorvo, Conan el Bárbaro de John Milius, Dune de David Lynch a partir de la novela de Frank Herbert, Nadie conoce a nadie de Mateo Gil – y también basada en la novela de Juan Bonilla, Acción mutante de Álex de la Iglesia y la ya citada El laberinto del fauno de Guillermo del Toro. Gracias a estas tres últimas películas Emilio Ruiz del Río obtuvo tres premios Goya a los mejores efectos especiales.
Si deseáis saber más de Emilio Ruiz del Río en particular y sobre los efectos especiales en general, en la Biblioteca os espera su autobiografía Rodando por el mundo: mis recuerdos y mis trucajes cinematográficos, así como los libros Efectos especiales: retoques y restauración de Tim Daly y Manual de efectos especiales para televisión y vídeo de Bernard Wilkie.
Por Nacho Larrea, bibliotecario de la UC3M.