El Club de Cine de la Biblioteca de Humanidades, Comunicación y Documentación cerró octubre con la película Bullet Ballet (1998), del director japonés Shinya Tsukamoto. El profesor Gabriel Domenech trajo esta película nipona para romper con la visión occidental de esta cinematografía, representada por directores clásicos como Kurosawa u Ozu y de la que lo más conocido son los las películas de samuráis y dramas tradicionales.
La película del ciclo se enmarca en subgénero del ciberpunk, donde Japón ha dado algunos de los directores más reconocibles. Los temas comunes son la marginalidad, la noche y la banalización de la violencia. Ver estas películas se convierten en una experiencia diferente: su ritmo alto, planos confusos, juego de sonidos hizo que los asistentes se mostraran bastante sugestionados por esta obra.
Los presentes en la sala de eventos encontraron en Tsukamoto varios referentes de películas occidentales como Réquiem por un sueño o El club de la lucha, ambas posteriores. Bullet Ballet se puede considerar una película visionaria: su fascinación por la tecnología y la influencia de esta en la sociedad describen un ambiente fascinante pero a la vez agresivo, bastante asemejado a nuestra realidad.
El tema central de la película y lo que despertó más polémica en el coloquio fue la visión de la violencia. Para Domenech el director es bastante ambiguo y amoral, mientras los ponentes analizaron esta estilización como un medio de redención, liberación, forma de autorrealizarse o incluso como síntoma de crisis de masculinidad.
Para terminar, el Prof. Domenech rescató una cita del director que no solo ayuda a entender su película sino también la sociedad actual: “Los ordenadores son cada vez más abundantes, esta ciudad se está convirtiendo en un lugar virtual, con relaciones sin contacto físico. El cuerpo esta inmóvil y el cerebro se mueve”.
Carlos Muñoz Gallego – Alumno de Doble Grado en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la UC3M