Ahora que prácticamente hemos terminado con la primera tanda de exámenes, queríamos compartir con vosotros el universo de seres que pueblan la Biblioteca en esta época. A lo mejor reconocéis alguno de ellos.
El Fluorescentirraptor: ser que se adapta a diversos hábitats y que se caracteriza por una obsesión compulsiva por subrayar (o tachar) los libros de la biblioteca con rotuladores fosforitos. Nos encantaría que estuviera en peligro de extinción.
El usuario invisible: no lleva vendas y su presencia es proporcional a la escasez de puestos de estudio. A determinadas horas sabemos que están allí porque hay un montón de cosas visibles en esos puestos, así que pensamos que deberían desaparecer por simple contradicción: lo invisible no puede ocupar espacio.
El Supercaloret: hace su aparición sin remedio en el mes de mayo y provoca que todo el personal esté atentísimo a las previsiones del tiempo. El Supercaloret es un villano, pero carecemos de un héroe a su altura para combatirlo porque, aunque os suene a excusa, no tenemos un artilugio como el que usaban en Gotham City, en nuestro caso para avisar a SuperAireAcondicionado, al que nosotros también adoramos.
El hombre/la mujer de la mancha: nótese que no estamos hablando de una región española, un canal o del Caballero de la triste figura. Hablamos de todos aquellos seres que dejan tras de sí un rastro de manchas de café u otros bebedizos que incluso pueden añadirles alas a su anatomía… Sabemos que en estas fechas una buena dosis de cafeína viene muy bien, pero un poco de cuidado también…
El monstruo de los gritos y susurros: no es un monstruo sueco sino uno con un origen inequívocamente patrio que se caracteriza por su habilidad para emitir ruidos más parecidos a los gritos que a los susurros, si tenemos que ser sinceros. Está muy adaptado a nuestro hábitat y es muy difícil de erradicar porque cada uno de nosotros llevamos uno dentro…
El bibliotecario convulso: porque el bibliotecario en esta época, será convulso o no será… así que pasa de ser patrullero del silencio a monstruo de los gritos y susurros, sobre todo si cae en sus manos algo que ha pasado por un fluorescentirraptor, sufre con el Supercaloret pero se tiene que poner la rebeca bibliotecaria cuando llega SuperAireAcondicionado normalmente el día en que bajan las temperaturas, para terminar derramando el café sobre un usuario invisible. Es que nosotros también somos humanos…o monstruos.