Cisne negro es un suspense psicológico dirigido por el estadounidense Darren Aronofsky, célebre también por títulos como Réquiem por un sueño (2000), La fuente de la vida (2006) y, más recientemente, Noé (2014). Considerada como una de las mejores películas, tal y como demuestran las sucesivas nominaciones y galardones que ha recibido (siendo uno de ellos el Óscar para Natalie Portman a Mejor Actriz Protagonista en 2011). Cisne negro ha supuesto una nueva oportunidad para hacer un tipo de cine alejado del que estamos acostumbrados, ya que no sólo utiliza elementos de suspense que hacen pensar al espectador, sino que también introduce el género musical en un momento en el que, la música como género en el cine, está de capa caída.
Natalie Portman se introduce en el mundo del ballet clásico de la mano de Nina, una bailarina neoyorquina que vive sólo para la danza. Esta afición le viene dada desde que nació, pues su madre también era bailarina y creció con este referente. Por otra parte, nada le gustaría más a Nina que tener la oportunidad de ser conocida a nivel internacional. Oportunidad que le viene de la mano del director artístico Thomas Leroy, que está buscando protagonista femenina para su nueva producción El lago de los cisnes. Desde un principio, Leroy se fija en Nina, pero pronto aparecerá una maravillosa Mila Kunis en el papel de Lily, que estará dispuesta a luchar por conseguir el papel que tanto tiempo llevaba buscando. Sin embargo, el personaje al que aspiran interpretar es algo peculiar: pues se trata del personaje de Cisne Blanco y Cisne Negro simultáneamente. Mientras que Nina encaja más en el personaje de Cisne Blanco atribuido a símbolos como la inocencia y la elegancia; Lily, en cambio, es la persona perfecta para representar la astucia y la sensualidad propias del Cisne Negro.
El tema principal que subyace en la película es el de la dualidad entre el bien y el mal. Realidades que están representadas por dos colores completamente opuestos: el blanco (representa el bien) y el negro (representa el mal). Es una película en la que domina la confusión hacia el espectador, donde lo único que el espectador sabe con certeza es la psicosis que desarrolla Nina a lo largo de la película, llegando incluso a introducirse en el mundo de las drogas para escapar de una realidad turbia. Realidad caracterizada, fundamentalmente, por la presión que ejerce la madre, Érica, sobre la bailarina; es una presión motivada por el deseo de ver a su hija convertida en la bailarina de prestigio que ella no pudo ser años atrás.
Por último, Cisne negro es un paralelismo del cuento del Patito Feo ya que, como le ocurre al protagonista del cuento, Nina tampoco es aceptada por su madre debido a que fue un bebé no deseado. Esto nos permite entender la complicada relación que tienen madre e hija, y nos deja ver cómo, al final de todo, los dos personajes (el patito feo y Nina) se terminan encontrando a sí mismos.
Sólo una de las dos chicas puede ser la elegida para representar el personaje protagonista de El lago de los cisnes, y el camino no será nada fácil. ¿Quién será?
Por Alba López Cepeda (alumna de la UC3M)