Siempre es muy interesante encontrase con una autora, Doris Lessing, que ha recibido el Premio Nobel en 2007. Por ese motivo me pareció muy interesante cuándo en el Club de Lectura en el que yo participo se decidió por esta novela. Sin embargo la experiencia no ha sido tan gratificante como esperaba. Las expectativas eran grandes y no se han cubierto con el éxito deseado. Es una de sus últimas novelas.
A raíz de unos testimonios orales de la historia que más tarde se plasmaron en unos manuscritos y que estos llegaron a manos de un historiador romano, coetáneo de Nerón, nos relata unos hechos que quieren explicar nuestro origen, de manera fabulada.
En La Grieta viven un grupo de mujeres muy arraigadas a sus costumbres, con la inercia de seguir con ellas y con miedo o precaución a cambiarlas. Son engendradas por la acción de la luna o el mar, al que están muy apegadas. Cuando se producen los alumbramientos las niñas son criadas y los niños denominados “monstruos” los abandonan en una roca para morir. Estos son rescatados por unas águilas y amamantados por una cierva.
Siempre dejábamos a las criaturas deformes allí, sobre esa roca, la roca sesgada que está justo pasada la Grieta. Una vertiente de la Grieta queda por encima de la Roca de la Muerte, sí, así es como la llamábamos. No criábamos a los bebés enfermos ni a los gemelos.
Ellas y ellos acaban encontrándose y las mujeres los necesitan para que las fecunden. Las cosas han cambiado y las mujeres mayores lo aceptan mal. No son una comunidad, se reúnen cuándo sienten la necesidad de estar juntos.
Este historiador, intercalando su vida y algunas vivencias, trata de explicarnos como puede ser nuestro origen y el despertar sexual de nuestros antepasados.
Es una historia con situaciones irreales y poco creíbles, de forma muy repetitiva. Encasillando a hombres y mujeres en estereotipos muy marcados. Ellas más relajadas, con mejor lenguaje, más ordenadas, más apegadas a las costumbres, necesitadas de mayor seguridad y ellos más aventureros con mayor necesidad de conocer nuevos lugares.
La conclusión de la obra es el final de la existencia por separado de hombres y mujeres, después de algunos cambios físicos surge la necesidad de vivir juntos.
La narración es buena, proveniente de una pluma como la de Doris Lessing, mujer muy comprometida con ideas liberales. Sin embargo, el tema que aquí aborda para mí no ha sido muy interesante.
En nuestra biblioteca tenemos más obras de Doris Lessing que puedes consultar.
Rosa J. Villarín