Sabemos que se acerca el día de San Valentín pero hoy no queremos hablaros de las citas relacionadas con el amor. En todo caso, os hablaremos del amor al conocimiento, porque la Biblioteca además de propiciar el amor romántico, ayuda a crear y transmitir el conocimiento y en esa tarea, las citas y las referencias bibliográficas juegan un papel imprescindible. En la publicación científica se deben identificar claramente las fuentes de información utilizadas y además, citar adecuadamente. Y lo mismo ocurre en cualquier trabajo que presentemos en la Universidad.

Ingredientes para una magdalena proustiana: Foto de MairieSY

Los que tenemos una edad, cuando nos comemos la famosa magdalena de Proust,  recordamos cuánto nos costaba hacer todo este trabajo de manera manual, siguiendo las indicaciones que alguno de nuestros profesores nos daba. Sin embargo, para vosotros la experiencia de la magdalena (o la palmera de chocolate, si os resulta más evocadora) será más placentera,  porque recordaréis cómo usabais gestores bibliográficos que os ayudaban a hacer la bibliografía de vuestro trabajo, a citar, a redactar las notas a pie de página, etc. Siguiendo con los ejemplos gastronómicos, en los dos casos  la receta y los ingredientes son los mismos, pero ahora estos gestores serían como un moderno robot de cocina que nos hace la vida más fácil.

Desde Biblioteca se ha elaborado una página donde podéis encontrar información sobre cómo citar según la norma UNE-ISO 690, enlaces a los gestores bibliográficos más utilizados, y un tutorial que os explica cómo elaborar referencias bibliográficas según el manual de estilo de la APA.

Bon appétit!