Aquiles y Pentesilea se mueren de amor, sobre todo ella.

Un año más, llegó el 14 de febrero, día de San Valentín  y de los enamorados. Llevamos una temporada viendo anuncios que nos prometen el amor a cambio de comprar un perfume, unas rosas o, lo nunca visto hasta ahora, de abrir una cuenta bancaria.

Todos sabemos que esas promesas no son verdaderas, y que donde realmente habita el amor es en la Biblioteca. Sí, en la Biblioteca la gente estudia, busca información y además, se enamora. Y no sólo eso, se enamora a la antigua, sin atreverse a confesarlo a la persona amada (suponemos que para no molestar a la gente que está estudiando).

Esto ha ocurrido siempre, pero los métodos para hacer saber que alguien nos gusta se han modernizado. Ya  no se deja  una confesión en papel en su puesto de estudio cuando está ausente, sino que se envía un mensaje a una página de Facebook que se encarga de publicarlo.

Se acabó eso de decirlo todo con una mirada, como  Aquiles y Pentesilea, que se miraron a los ojos cuando el héroe griego había herido de muerte a la amazona y se dieron cuenta que se querían. Los mitos tienen su encanto, pero en descargo de los nuevos métodos, hay que decir que la solución moderna es mucho menos trágica.

Os  deseamos un feliz día de San Valentín, acompañados de una selección de lecturas y DVDs que esperamos que os enamore, y os recomendamos no gritar (literalmente) vuestro amor a los cuatro vientos. Recordad: el susurro conviene mucho más al amor…y a la Biblioteca.