Desde hace unos años se vienen poniendo de moda las series basadas en la vida cotidiana de un hospital: Doctor en Alaska, Urgencias, Hospital Central, House, Scrubs… Entre todas ellas, se encuentra Anatomía de Grey, que en este momento cuenta con siete temporadas, la última aún incompleta, y que comenzó su emisión en el 2005. Recibe el nombre de un famoso manual de anatomía: Anatomía de Gray.
La protagonista es Meredith Grey, hija desatendida por su madre y abandonada por su padre, que ha entrado en el programa de residentes en el hospital Seattle Grace. Éste personaje, caracterizado por Ellen Pompeo, no tarda en trabar amistad con sus cuatro compañeros alrededor de los cuales se desarrollarán las historias en el hospital.
Cada personaje tiene un pasado distinto y complicado a su modo, y nuestra protagonista no es menos: tiene problemas para relacionarse, no termina de comprender los lazos afectivos que se forman entre las personas y utiliza el tequila y el sexo como métodos para hacer soportable su vida de diario.
Es esta situación la que le arrastra a los brazos de un desconocido que, como después se muestra en la serie, ejercerá como su superior y profesor. Derek, que así se llama, será una pieza clave en la vida de Meredith desde entonces y se desatará una historia de amor odio entre ambos que afectará tanto a compañeros de residencia como a profesores cirujanos del hospital. Estas dificultades se deben a que su madre, reconocida cirujana ahora afectada por el alzheimer, daba más importancia a sus operaciones que a su hija, y se divorció de su marido porque tenía una aventura con un compañero del hospital que resulta ser el jefe de cirugía de Meredith.
A lo largo de las temporadas se observa el crecimiento personal que experimentan los cinco compañeros, que queda reflejado en la serie por medio de los problemas personales que acarrean los pacientes. Las experiencias que ellos han vivido y los consejos que dan les sirven a los médicos para reconducir su vida y poder salvar en menor o mayor medida los problemas en los que se encuentran.
Y por mucho que todo esto haga pensar que se trata de un simple culebrón en un hospital, se toman muy enserio la recreación de las operaciones que se realizan, con los síntomas, la sangre y las dificultades extremas que se pueden encontrar en un quirófano.
La serie ha sido reconocida en varias ocasiones con Globos de Oro: en el 2006 a la mejor actriz secundaria de TV – Sandra Oh-, y en 2007 a la mejor serie de televisión – drama; y con un Emmy, en 2007, a Katherine Heigh. Ambas actrices dan vida a las amigas más cercanas de Meredith.
También han recibido premios del Gremio de Actores y de People’s Choice.